viernes, abril 17, 2009



Que bueno es poder sentirse tan cerca de las nubes (aunque seas grises y tristonas...), no crees?

Ayer vino a verme una amiga, Marta. http://mirandoadar.blogspot.com/.
Tambien hace fotos y tiene un corazon, solo comparable con el brillo de sus ojos.
Trajo una caja llena de regalos, y nos dejo elegir. Una caja grande y azul.
Me pregunto que qué tal estaba yo y nos prometimos llorarnos un rato un dia bajo el sol del Rastro madrileño.
Creo que es una chica que merece mucho la pena. Ojala tenga suerte...

1 comentario:

VolVoreta dijo...

Llorar en un hombro amigo...es la mejor de las terapias y no todo el mundo puede o sabe hacerlo. Aprovecha la ocasión...siempre será más "divertido" en el rastro, dá para mucho. Podéis hacer un photowalk!
También le deseo suerte a Marta, me gustan sus fotos.

Te dejo besos.